La probabilidad estadística del amor a primera vista

¿Quién hubiera imaginado que cuatro minutos pueden cambiarlo todo?

¿Desde cuándo son puntuales los aviones a la hora de despegar? Hadley ha llegado cuatro minutos tardes, lo que, bien pensado, no parece mucho: una pausa para la publicidad, el descanso entre dos clases, el tiempo que lleva calentar un plato precocinado en el microondas... Cuatro minutos no son nada. Cierra los ojos solo un instante y, cuando los vuelve a abrir, el avión ha desaparecido.

Hoy debería ser uno de los peores días en los diecisietes años de la vida de Hadley Sullivan: ha perdido su vuelo y ahora está atrapada en el aeropuerto JFK de Nueva York. Llega tarde a la segunda boda de su padre, que se celebrará en Londres, con una mujer a la que Hadley ni siquiera conoce y que pronto se convertirá en su madrastra. Pero entonces conoce al chico perfecto en la atestada sala de espera del aeropuerto. Su nombre es Oliver, es británico y su asiento es el 18C. El de Hadley, el 18A.

OPINIÓN PERSONAL 

Me alegro tanto de haberme animado a leer este libro. La verdad es que escogí este libro por su precio, porque es bastante económico, aunque este libro también era para una lectura conjunta que he realizado con una amiga (cuando mi amiga suba el video os dejo en link para que le echéis un vistazo) Pero aparte de que era un libro económico también lo cogí por su sinopsis y no me arrepiento para nada porque me ha gustado muchísimo. Es una novela bastante corta y sencilla, pero tiene una trama divertida y fresca que sin duda recomiendo.

Con este libro la verdad es que tenia las expectativas muy altas, porque es estilo de libro que se que me gusta. La historia sucede prácticamente en 24 horas, pero en todo momento quieres saber más y te enganchas desde la primera pagina. A pesar de ser un libro cortito, conectas muy bien con los personajes y los sientes muy cercanos a ti, aunque solo hayas pasado 24 horas con ellos.

El personaje de Hadley muy sencillo, es una adolescente de diecisiete años que sufre por la separación de sus padres, aunque ella sigue viviendo con su madre en Estados Unidos, ella quiere mucho a su madre y quiere los mejor para ella. Oliver es un personaje muy encantador, amable y muy caballeroso.

A lo largo de la novela se ve la diferencia que tiene los americanos y los británicos ya que la chica es americana y el chico es británico, se nota esa forma que tienen diferente de educar a los niños y en todo momento se ve reflejado ese cambio.

El final fue un poco de golpe e inesperado, a decir verdad me esperaba otro final como mas diferentes, aunque sin duda me ha gustado mucho, pero también hubiera preferido unas cuantas páginas de más.

Os animo a leer este libro, porque es una historia corta y romántica, así que es perfecta para leer cuando sea.

Si habéis leído esta novela o queréis leerla dejármelo en los comentarios.

Besos y felices lecturas.